La estación de Girona para el tren de Alta Velocidad (AVE) es una gran estructura subterránea emplazada en el encuentro de tres ríos (Onyar, Ter y Güell) en el centro de la ciudad de Girona.

Sus dimensiones principales son: longitud de 650 m, anchura tipo de 51 m y profundidad de 25 m bajo superficie.

El terreno es, dada la presencia de los ríos antes señalada, básicamente arenoso, con algunos estratos de limos y arcillas. El nivel freático está a 5 m de profundidad, por lo que en el punto más bajo de la estación se tienen unos 21 m de subpresión. Ha sido necesario deprimir dicho nivel durante construcción en el interior del recinto.

El recinto se ha delimitado mediante pantallas de hasta 35 m de profundidad, de hormigón armado, excavadas mediante hidrofresa. En el interior se han dispuesto pilares, también ejecutados con hidrofresa, disponiendo algunos en su parte superior, de tramos mixtos (hormigón – acero).

En el interior se dispone una primera planta subterránea que funcionará como estación de autobuses, dos plantas intermedias para aparcamiento de vehículos privados, y los andenes de la estación en el nivel inferior.

Todas las losas que constituyen estos niveles, así como la de cubierta, son de sección nervada, con aligeramientos de 2 x 2m en planta y entre 1,2 y 0,8 m de canto. Se han construido en hormigón pretensado.

Para compensar la subpresión, además de la geometría de las contrabóvedas para inducir su trabajo por forma, ha sido preciso realizar unas pantallas de pilotes que actúan como anclaje por rozamiento a lo largo de toda la estación.